El conocido como padre Tià, Sebastià Arrom, cuenta desde hoy con una calle a su nombre. La nueva vía con el topónimo del fundador de la iglesia y el colegio Sant Josep Obrer es la anteriormente denominada Mare de Déu de Montserrat, en el barrio de Son Gotleu, y esta mañana ha sido descubierta la placa con el nombre de Sebastià Arrom, que falleció el 13 de abril del año pasado a los 91 años.

El alcalde de Palma, Antoni Noguera, ha destacado durante el acto que el padre Tià “fue un referente en valores y un gran impulsor de los cambios en Son Gotleu y el Rafal”. El obispo de Mallorca, Sebastià Taltavull, le ha acompañado en el acto, así como varios regidores del consistorio palmesano.

Sebastià Arrom nació en Santa Eugènia y cursó la carrera eclesiástica en el Seminario Diocesano de Mallorca entre 1936 y 1939, en plena Guerra Civil. Desde 1944 y hasta 1949 fue becario del colegio pontificio de la Sapiència, y un año después fue ordenado sacerdote por el obispo Hervás.

En 1954 fue designado rector de la parroquia de Sant Josep Obrer y ese mismo año creó la escuela de Educación Primaria.

Desde 1955 hasta 1960, Sebastià Arrom coordinó las obras de construcción del nuevo templo parroquial, proyecto del arquitecto Josep Ferragut. En 1990 promovió la construcción de un centro de Secundaria y de adaptación del Bachillerato en la Logse y los ciclos formativos de grado medio.

En 1993 fue nombrado miembro del consell consultiu de la Universitat de les Illes Balears (UIB). En 1997 se jubiló y fue nombrado canónigo de la Catedral de Palma. En 2003 recibió el Premio Ramon Llull.