La reforma de la calle Rodríguez Méndez, situada entre la plaza Madrid y la de es Fortí, va a ganar un 6% de espacio para los peatones. La ampliación de las aceras, así como la implantación de un carril bici a lo largo de sus algo más de 200 metros de longitud, supondrá también la supresión de los 29 árboles existentes en estos momentos a ambos lados de la vía, que serán sustituidos por otros 24 ejemplares de la misma especie (plataneros), aunque sólo en uno de los lados.

El concejal de Infraestructuras de Cort, Rodrigo Andrés Romero, ha explicado esta mañana que los árboles actuales debían ser sustituidos debido a su mal estado y a que están sembrados cerca de las fachadas, lo que ha provocado un crecimiento descompensado y que su copa no pueda desarrollarse. Asimismo, en algunos casos el tronco ocupa parte de la calzada, por lo que no era adecuado proceder solo a la sustitución del arbolado actual para sembrar otros ejemplare en el mismo sitio.

De esta forma, la remodelación prevé ampliar la acera de la parte de los números pares hasta los 3,5 metros, a la que seguirán dos metros de carril bici,1,15 en los que se sembrarán los árboles y se instalarán las nuevas farolas. A continuación se dejan dos metros par el estacionamiento en cordón, seguido de tres carriles de circulación (los mismos actuales) aunque con una anchura de 2,9 metros, conel fin de facilitar la pacificación del tráfico. En el lado de los números impares (en el que la una de las fachadas de la iglesia de Sant Sebastià) la acera será de 2,95 metros. El concejal explicó que las 21 plazas de aparcamiento que se pierden en esta calle se podrán compensar con la ampliación del estacionamiento de la calle Andreu Torrens.

Con esta nueva distribución los árboles se sembrarán a una distancia de cinco metros de las fachadas, lo que permitirá que crezcan sin interfrerencias y que puedan desarrollar su copa simétricamente dando más sombra. Además se va a instalar el denominado subsuelo estructural debajo del espacio ocupado por el carril bici, y el estacionamiento de vehículos, lo que permitirá que las raíces también pueden crecer sin interferencias, además de absorber parte del agua que se acumula cuado llueve.

El presupuesto de esta actuación es de 851.000 euros. Se prevé que las obras puedan iniciarse a finales de año y que estén concluidas en dos meses. Romero explicó asimismo que, al tratarse de una calle de 20 metros de anchura, similar a las existentes en el Eixample de la ciudad, esta distribución se va a adoptar como prueba piloto para aplicarla en otras actuaciones, aunque las secciones pueden variar en función de si en ellas se implanta el carril bici o no o del número de carriles que se destinen a la circulación.