La asociación de Restauración ha presentado una contraoferta a la propuesta del equipo de gobierno par la modificación de algunos puntos de la actual ordenanza de ocupación de la vía pública por mesas y sillas.

Si bien se mantiene el desacuerdo sobre la ocupación que se puede permitir en los ejes cívicos de Fàbrica y Blanquerna y en la primera línea de la Platja de Palma, zonas en las que se prevé una reducción del 20%, 35% y de prácticamente el 50% respectivamente, los empresarios han presentado una oferta en la que están dispuestos a reducir estos porcentajes, aunque no de forma significativa.

Por el contrario, han cedido en la propuesta municipal, apoyada por la Federació d'Associacions de Veïns, entre otras entidades, de suprimir en el plazo de 18 meses las pérgolas al menos en las calles Fàbrica y Blanquerna.

Asimismo, estarían dispuestos a aceptar la propuesta de disminución de la ocupación planteada por Cort en las calles del centro. De esta forma las terrazas de las plazas Porta Pintada y Cort, mantendrían las ocupaciones actuales, mientras que en la del Olivar se reduciría menos de un 2%.

En la plaza d'en Coll, no obstante, la superficie ocupada por mesas y sillas se reduciría en un 20%, pasando de los 176 metros actuales a 140.

La zona situada al principio de la calle Sindicat, también se reduce en un 20%; en la plaza Alexandre Jaume, un 15% y en la de la Mercè, las terrazas sufrirían una merma del 44%, puesto que, de los 45 metros ocupados actualmente sobre una superficie total de 218 metros, se quedarían con 30 metros. El vicepresidente de la asociación de Restauración, Francisco Martínez, valoró "el esfuerzo de acercamiento de posturas" realizado por parte del Ayuntamiento ya que, entre otras cuestiones, se ha tenido en cuenta su propuesta de mantener los dos metros actuales para el paso de peatones en toda la ciudad excepto en el centro y Santa Catalina.

Desde Cort se insistió en que los objetivos de la modificación de la ordenanza se centran en buscar el equilibrio entre el uso público y el privado, eliminar la sobreocupación en determinadas zonas y contribuir a la mejora de la movilidad y el embellecimiento de la ciudad.

Desaparecerán 42 ocupaciones

En el centro y en Santa Catalina se fija en 2,5 metros el espacio libre para el paso de peatones, cuando inicialmente se planteaba un mínimo de tres en toda la ciudad. Con esta última propuesta municipal, teniendo en cuenta que en Palma hay 1.098 terrazas, van a desaparecer 42 (un 4%), 17 de ellas en el centro y 25 en Santa Catalina.

Asimismo, van a desaparecer 52 microocupaciones, consistentes en la colocación de una mesa y dos taburetes por local pegados a su fachada, 27 de las cuáles están en Santa Catalina.

La zona más conflictiva es la de la calle Fàbrica ya que en el tramo más alejado de la avenida Argentina las terrazas ocupan el 42,3% de la denominada área potencial de estancia, el 63,2% en la zona intermedia y el 47,8 en el resto. Este parámetro es el espacio que queda para las personas una vez se ha descontado el paso de los coches, los accesos y la circulación de los peatones por el lado de las fachadas.