El Ayuntamiento ya tiene aprobado el proyecto de derribo de 46 construcciones del poblado de Son Banya, que se llevará a cabo los días 17 y 18 de abril. Sin embargo, la salida de las primeras familias se puede producir mucho antes, ya que ocho ya están en fase de búsqueda de vivienda.

La concejala de Bienestar, Mercè Borràs, ha explicado que la aprobación del proyecto de demolición y tratamiento de residuos de amianto es un paso "indispensable" en el proceso administrativo para poder desmantelar el poblado.

Este trabajo de derribo de las 46 estructuras, 45 viviendas y un lugar de uso común, se adjudicará por concurso a una empresa por un importe de 495.756 euros.

Hasta el momento, 20 familias con orden de desalojo han contactado con el Ayuntamiento y 13 cumplen con todos los requisitos para cobrar los 1.000 euros de ayuda. De esos casos, ocho ya están en fase de búsqueda de vivienda. De ellos, solo uno ha solicitado una hipoteca, el resto busca en el mercado de alquiler.

El Ayuntamiento tiene presupuesto para ayudar a 20 familias este año. El resto, hay otras 20 sin orden de desalojo que también han contactado con Bienestar, se irán atendiendo según las posibilidades de cada año, ha comentado Borràs.