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Sa Torreta

El bulevar que Palma liquidó

La Feria de Muestra de 1962, en el bulevar de Palma. Castell

Palma tiene un bulevar y medio. El completo es el que publica cada domingo Matías Vallés en la contraportada de este periódico. El medio, incluso menos, es el que cubre el tramo de las avenidas entre la Escola Graduada y la gasolinera de la Costa del Gas. El bulevar de la ciudad quedó mutilado el día que triunfaron los coches sobre los humanos.

Para la Real Academia es una "calle generalmente ancha y con árboles" o un "paseo central arbolado de una avenida o calle ancha". La segunda acepción encaja como un guante en el tramo en el que se ubica el baratillo.

La palabra procede de la neerlandesa bolwerk, que significa bastión o baluarte. De los Países Bajos pasó al francés como boulevard y después fue acogida por la Real Academia.

El gran bulevar palmesano se extendía a lo largo de todo el recorrido de las avenidas. Desde el Institut Ramon Llull hasta la plaza Porta des Camp.

Nació, siguiendo estrictamente el origen de la palabra, en el solar desocupado tras el derribo a partir de 1902 de las murallas renacentistas de Palma. Imitando el modelo de París, se construyeron aceras arboladas en cada lado del paseo y un espacio central reservado a los caminantes, con árboles que daban sombra y bancos para descansar.

No sé si el bulevar palmesano fue muy utilizado para quemar calorías o para el galanteo (que encontraba su espacio natural en el Born), pero sí acogió numerosas actividades. Por ejemplo, los alumnos de La Salle de los años 60 observábamos con envidia desde nuestros pupitres las casetas del Ram instaladas en Via Alemanya. El tramo entre las calles Aragó y Manacor, acogía los sábados el mercado de animales vivos. Existen fotos de los años veinte. Y cuando se acercaba la Navidad, allí se instalaba la Fira de Sant Tomàs. La Feria de Muestras de 1962 se acomodó en el segmento situado frente al desaparecido cine Avenida.

Todo murió cuando don coche se convirtió en el amo de la ciudad. El bulevar le fue cediendo su sitio metro a metro . Lo que durante medio siglo fue un espacio reservado al ciudadano y al comercio fue liquidado sin piedad.

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