Toñi Fernández, portavoz de Port Petit, aseguró ayer que la propuesta presentada el jueves por la tarde por la Autoridad Portuaria de Balears cumplirá el objetivo de que el puerto del Molinar no aumente de tamaño, mantendrá "la armonía del barrio" y será "un instrumento social". A falta de conocer la "letra pequeña" del proyecto, Port Petit alaba que se mantenga el contacto con el mar y "la mejora en el paseo con la pasarela de la escuela de vela". Fernández ve recogidas las peticiones de la plataforma que desde hace años se moviliza en contra de una ampliación de este puerto y cree que la reforma del club del Molinar supone "una metodología que se debe aplicar" a otras cuestiones. "La ciudadanía tiene algo que decir siempre", concluyó.

El proyecto de reforma mantiene las dimensiones actuales del puerto y el número de amarres. Prevé una nueva escollera de protección y una escuela de vela cuya cubierta será una especie de mirador. El espacio peatonal se verá incrementado con la eliminación del aparcamiento en el interior del puerto y la zona de tráfico rodado. Habrá nuevas áreas públicas y el puerto quedará abierto al paseo.

ARCA es una de las entidades que también forman parte de Port Petit. Su portavoz, Àngels Fermoselle, afirmó que la propuesta redactada por el equipo de ingenieros MC Valnera y Junquera Arquitectos "beneficia a toda la sociedad", posibilita la integración entre el puerto y la ciudad, aumenta la seguridad y mejora el edificio del club, eliminando los añadidos. "Es un punto de culminación y un éxito de la campaña de Port Petit", añadió Fermoselle.

El alcalde de Palma, Antoni Noguera, también se congratuló: "Hemos salvado uno de los lugares más emblemáticos y singulares de la ciudad. Estamos de enhorabuena y hemos cumplido uno de los principales puntos del programa: un port petit en el Molinar".

Otra asociación vinculada al barrio, Es Born del Molinar, valoró "la actitud de querer arreglar el tema", según manifestó su presidente, Miquel Obrador, quien calificó como "fantástico" el proyecto de escuela de vela. "Consideramos que es un trabajo muy bien pensado y de futuro", puntualizó sobre cuestiones como la trampa de sedimentos bajo el agua.

Obrador sí planteó sus dudas acerca de si los servicios de mantenimiento, como la grúa para sacar las barcas del agua, serán adecuados, qué restaurante habrá y si la reforma encarecerá las cuotas. "Lo que queremos es que la gente de Palma, dijo.

Cuestiones por resolver

Joan Forteza, presidente de la Federación de Asociaciones de Vecinos de Palma, cree que "es un proyecto que marca un antes y un después de lo que se proyectaba en el Club del Molinar", aunque también expresó sus dudas acerca de la capacidad de la lámina de agua para acoger todas las embarcaciones y cumplir con la normativa de seguridad. La federación apoyaría un ligero aumento, en ese caso. En opinión de Forteza, también queda por saber "si los socios tendrán que asumir parte del coste o no" del proyecto.

"Satisfecho y preocupado". Así se sintió Miquel Sunyer, presidente de la Asociación de Clubes Náuticos de Mallorca, al salir de la presentación del proyecto. Satisfecho por ver que se recoge la idea "de lo que supone un club náutico", pero preocupado por "cómo el Club Marítimo del Molinar podrá salir adelante". Sin conocer la propuesta en profundidad, Sunyer interpreta que la APB construirá la escollera y embellecerá la zona, pero que será el adjudicatario de la concesión el que asuma el coste de la escuela de vela, los pantalanes y la reforma del edificio. "Si gestionan 80 amarres, no sé cómo lo podrán hacer", añadió.

A este respecto, el actual adjudicatario del Club declaró "estar en manos" de la Autoridad Portuaria.