El centro de protección de animales de Son Reus acogió el pasado años un 7% menos de perros, pero como dato negativo, la entrada de gatos subió un 32%, según dio a conocer ayer esta entidad.

El total de entradas de perros ha pasado de 1.612 durante el año 2016 a 1.497 en 2017, siguiendo la tendencia de decrecimiento de los últimos años, informó el Ayuntamiento. "Lamentablemente, los abandonos (animales encontrados con chip), han crecido ligeramente, pero se ha reducido el número de animales vagabundos y de las renuncias", añade el comunicado. De los perros acogidos, 833 se adoptaron y 646 fueron devueltos a sus dueños.

El dato negativo es que a Son Reus llegaron 1034 gatos el pasado año, frente a los 783 de 2016. Por una parte, esta cifra también es un indicativo positivo, porque cada vez hay más renuncias (personas que entregan los gatos al centro en lugar de abandonarlos) y porque significa que crecen las capturas de animales vagabundos.

El centro de Son Reus tiene previsto participar en las Beneïdes de Palma de hoy para recordar la responsabilidad del cuidado de mascotas y fomentar la adopción de animales.