Ayer por la mañana fueron pillados in fraganti dos personas que estaban descargando de manera ilegal trastos y electrodomésticos en la calle Brotad. Un tuit de una ciudadana dio aviso a Emaya de la infracción que rápidamente envió a controladores medioambientales. Pudieron identificar a los infractores y se levantó acta.

De acuerdo a la actual normativa la multa puede oscilar entre 1.500 y 3.000 euros al haber electrodomésticos entre los trastos abandonados en la vía pública de manera ilegal. Éstos son residuos peligrosos, de ahí que la sanción sea más grande.

La empresa de limpieza viene constatando que "incivismo aparte, que lo hay y mucho", también "existen pequeñas mafias que por poco dinero te vacían la casa y dejan los trastos en la calle".

La campaña Deixam els trastos propone horarios de recogida para cada zona, pero no son siempre respetados.