Diario de Mallorca

Diario de Mallorca

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Palma a Palma

Electricidad estática

Electricidad estática

Días de frío seco. De mucho abrigo. También de electricidad estática. Ese fenómeno casi mágico que no te esperas y que siempre te sorprende. Ocurre cuando te quitas un jersey. Y de repente sobreviene una especie de crujido entre las prendas. Si lo haces a oscuras, incluso divisas unos pequeños chispazos. De un color entre blanco y verduzco. Muy rápidos. Misteriosos.

La electricidad estática puede alcanzar niveles espectaculares. Como cuando se acumula en un edredón sintético. Y al moverlo contemplas los destellos exactamente igual que cuando divisas a lo lejos una tormenta. Reluciendo los relámpagos en la base de las grandes nubes. Sólo que en este caso no hay nubes ni horizonte. Sólo un cobertor que desprende luminosidades extrañas.

Estática que no siempre es puramente pictórica. Muchas veces nos sorprende con auténticas descargas. Al tocar un objeto. Muy frecuentemente al abrir o cerrar la puerta del coche.

Sientes un calambrazo tenue, que te alarma. Que de repente te hace comprender que el mundo no es tan simple como te parece. Que todo tiene una energía. Que todo te puede contagiar su fuerza o electrocutarte. Porque al fin y al cabo, todos somos emisores y receptores.

Cuando se acumula la energía estática en la ropa te hace sentir como una especie de pequeño superhéroe. Cargado de la fuerza cósmica. Capaz de crear o destuir con sólo apuntar con el dedo.

La electricidad estática sólo se aprecia cuando se descarga. Pero mientras tanto, la llevamos encima sin ser conscientes. Acumulamos esos calambres cósmicos que nos llegan del aire, de los iones, de las materias positivas y negativas. Conceptos que para nosotros no existen más que cuando se manifiestan.

Ocurre como con tantas cosas ocultas. No sabes que las llevas dentro. Ni siquiera lo imaginas. Pero un día se desencadena el proceso y salen a la luz. Y entonces comprendes que en la realidad cotidiana, que crees tan conocida y trivial, hay relámpagos escondidos, fosforecencias subterráneas.

Y que todo es mucho más complejo de lo que creías.

Compartir el artículo

stats