Ha sido una de las reformas, y aún no ha acabado, más largas de la historia reciente de Palma: la de las murallas, obra del equipo de arquitectos Elías Torres y Martínez Lapeña. Hoy setenta y cinco personas han sido guiadas por Torres, 34 años después de haber llevado a cabo el proyecto de rehabilitación de este elemento fundamental del patrimonio histórico de la ciudad.
Para efectuar intervenciones en patrimonio histórico hay que ser "respetuoso, tener cierta libertad para trabajar y no tener miedo a arriesgarse, es decir, no tratar de momificar o reproducir exactamente lo que había", ha afirmado Torres.
La actividad ha sido organizada por la demarcación de Mallorca del Col·legi Oficial d`Arquitectes de les Illes Balears (COAIB) y ha empezado en el patio de Ca la Torre; de ahí se han dirigido a Ses Voltes, el Baluard Berard y la plaza Llorenç Villalonga hasta alcanzar el Baluard del Príncep, el último tramo de la muralla en ser restaurado, y del que aún quedan dos etapas para darlo por finalizado.
Elías Torres y Martínez Lapeña han sido los responsables de la renovación del parc Güell en Barcelona; del Museo de Menorca o del portal de la iglesia de Sant Gaietà, en Palma, entre muchas otras más.
El año pasado recibieron el prestigioso RIBA International Fellwoship (reconocimiento para profesionales no británicos) que concede anualmente el Royal Institute of British Architecs.
