Las recientes torrentadas y sus consecuentes arrastres de material al torrente de na Bàrbara en su encuentro con el mar en el Portixol han llevado a realizar estos días las habituales labores de limpieza de fondos. Se trata de "trabajos de mantenimiento" asumidos por la Autoridad Portuaria con el objetivo de evitar que la acumulación de estos fangos provoquen mal olor al enturbiar el agua además de poner en riesgo las embarcaciones amarradas.