El próximo año habrá movimiento en el antiguo cuartel de Automóviles. Son Simonet se pone en marcha. Su propietario, el grupo inmobiliario La Llave de Oro confirmó a este diario que las obras de edificación empezarán "el último trimestre del 2018".

Al final no van a ser 272 viviendas como se dijo a principios de año, sino que van a construirse 216, y 300 plazas de aparcamiento. Ferran Marsà, consejero delegado de la empresa catalana y nieto del fundador, explicó que "hemos optado por reducir el número de pisos para poder hacerlos más grandes".

En esa misma línea, Marsà subrayó que se trata de "una promoción que será importante para la ciudad por su singularidad y tamaño".

El proyecto para construir en este solar de 15.000 metros cuadrados ha sido adjudicado al estudio Duch Pizà, y éstos a su vez han invitado a participar al estudio Ripoll-Tizón. La inmobiliaria había elegido una terna de profesionales que completaban los estudios de Sánchez Cantalejo + Tomàs, y el de Reynés. Al final quedará en manos del mismo estudio que ha restaurado el Casal Balaguer o que ha levantado el Casal de ses Veles, la rehabilitación de las Cases de Son Cànaves, o la reordenación de la plaza de Cort, entre otras.

"Queremos hacer un proyecto con una arquitectura más atrevida, que no sea una isla de casas cerradas sino que sea una manzana abierta a la calle. Va a ser una promoción que será importante y singular para la ciudad", expresó el consejero; quien a su vez negó que acabasen en manos de inversores privados con vistas a convertirlos en alquiler vacacional. "Está dirigida a la gente de Palma, no a los grandes inversores extranjeros", aseguró.

La arquitecta Sè Duch apunta la "importancia que tiene un proyecto privado de estas dimensiones". "Ahora falta que desde la Administración no se ralentice demasiado y se pueda poner en marcha una promoción que se quiere singular para la ciudad".

El ahorro energético será clave. "Hemos intentado que todas las viviendas tengan buena orientación acorde a los criterios de sostenibilidad. Todas las viviendas tiene doble fachada", indicó la arquitecta Sè Duch.

Los pisos van a ser de 2, 3 y 4 dormitorios, con superficies de 70 metros cuadrados a 105 los más grandes. El promotor no dio precios. "Faltan muchos detalles para dar un precio estimativo", indicó Ferran Marsà.

Desde que se colocó la valla publicitaria frente al antiguo cuartel, el teléfono y el mail no paran. "Estamos recibiendo muchas llamadas. Hay lista de espera", indicaron desde la oficina en Palma.

Zona ajardinada para todos

Los cinco edificios tendrán 6 y 8 plantas. Su construcción se va a dividir en cuatro fases.

El proyecto elegido cuenta con 6.200 metros cuadrados que es espacio público. "Hemos trabajado para que el interior de la manzana de al parque. No hemos hecho un proyecto de situar viviendas en manzana", señaló la arquitecta. En cierto modo, los inquilinos del futuro complejo vivirán en una especie de oasis. Se accederá a ellas por tres lados, la carretera de Valldemossa, la calle Guillem Forteza y la de Alfons el Sabi. El proyecto incluye la rehabilitación de los antiguos locales del cuartel que daban a la carretera de Valldemossa y que acabarán convertidas en casas.

Desde el año 2000 el cuartel estuvo cerrado. Propiedad del ministerio de Defensa, lo sacó a subasta en 2015 y la única empresa que optó fue La llave de Oro. Pagó 5,5 millones de euros. A principios de este año, Cort aprobó el cambio urbanístico en Son Simonet al aprobar el Plan General de Ordenación Urbana PGOU.

La promotora catalana ha ejecutado varios proyectos de pisos en la zona. "Confiamos mucho en este proyecto. Creemos que será bueno para la ciudad", concluyeFerran Marsà.