La coincidencia del fenómeno en fin de semana y la popularidad que está adquiriendo su contemplación en los últimos años permiten prever una asistencia masiva al próximo espectáculo del Vuit de la Seu. La cita es el sábado 11 de noviembre, festividad de Sant Martí,a partir de las siete y media de la mañana.

A esa hora, la Catedral abrirá sus puertas para que todos los asistentes puedan contemplar un acontecimiento singular que solo puede observarse durante dos días al año: el 2 de febrero, festividad de la Candelaria, y el 11 de noviembre.

Durante estos dos días la luz del sol atraviesa el rosetón mayor de la Catedral y proyecta el reflejo de sus 1.236 cristales de colores en la pared del portal principal, exactamente bajo el rosetón del portal mayor.

El espectáculo se inicia aproximadamente a las ocho de la mañana y llega a su momento culminante a las nueve menos cuarto, cuando los dos rosetones forman un ocho. En 2007 apenas 200 personas se reunían para contemplar el fenómeno lumínico. El los últimos años en cada cita se superan las mil personas y la expectación va a más.

El gran rosetón de la Catedral, que preside e ilumina todo el edificio, es el más grande del mundo gótico. Posee 11,5 metros de diámetro. Como se ha dicho lo integran 1.236 cristinales y en él se dibuja la estrella de David. Ha tenido que ser restaurado en cuatro ocasiones. La penúltima de ellas tras caer una bomba en el palacio de La Almudaina durante la Guerra Civil. Y la última, en el año 2008, lo que obligó a montar un gran andamio sobre el altar mayor para reparar una fractura que se relacionó, pero no pudo probarse, con los espectáculos de fuegos artificiales de la festividad de Sant Sebastià.

El pròxim sábado a partir de les 7.30 horas , la Catedral abrirá sus puertas al público para quien lo desee pueda contemplar el espectáculo. Pero además, el acto será retrasmitido en directo a través de la página de Facebook de la Seu.

La orientación de la Catedral hacia el nacimiento del sol, herencia de su construcción sobre la antigua mezquita de Madina Mayurqa, produce otro efecto lumínico en la Seu el 21 de diciembre, coincidiendo con el equinocio de invierno. La luz que penetra por el rosetón mayor sale por el interior del rosetón menor en una coincidencia perfecta que el público contempla desde el Baluard de Sant Pere y cada año cuenta con más asistentes.