La concejala de Servicios Sociales de Cort, Mercè Borràs, rechazó ayer en comisión la propuesta del PP para que se anulara el copago del servicio de asistencia domiciliaria, porque la intención municipal es la de "universalizar los servicios de dependencia". Borrás explicó que han quedado fuera 104 solicitudes de teleasistencia, 62 de ayuda a domicilio y 85 de comida. Insistió en que los usuarios, excepto los que tengan ingresos inferiores a 537 euros abonarán una cuota en función de su capacidad económica.