El Ayuntamiento de Palma ha decidido aplazar la prohibición de distribuir, por parte de los comercios, bolsas de plástico de un solo uso prevista en la ordenanza municipal para enero de 2018 y, en consecuencia, la patronal del pequeño comercio Afedeco ha retirado el recurso judicial interpuesto contra este punto de la normativa local.

El presidente de esta patronal, Rafel Ballester, explicó ayer, acompañado por la teniente de alcalde de Medio Ambiente, Agricultura y Bienestar Animal, Neus Truyol, que su entidad había decidido recurrir por vía judicial la decisión municipal al entender que el adelanto de la prohibición por parte de Cort perjudicaba a aquellos asociados que disponían de una reserva de bolsas de estas características, por lo que solicitaban que se establezca un período transitorio.

Por su parte, Truyol explicó que en estos momentos el Govern balear está redactando la ley de residuos, cuyo borrador establece que las bolsas de plástico de un solo uso estarán prohibidas a partir de enero de 2019, por lo que han decidido aplazar la aplicación de la ordenanza municipal a la fecha que finalmente establezca la Ley balear.

Según Truyol, no se deberá modificar la ordenanza puesto que en este punto concreto no incluye una prohibición que deba entrar en vigor necesariamente en enero del próximo año, sino que indica que "podrá" hacerlo. Según esta interpretación lo único que deberá hacer Cort es no aplicar la prohibición a partir de enero del próximo año y esperar a la fecha que finalmente incorpore la Ley Estatal.

Unidades de pago

Según Truyol, el Govern prevé que esta ley, que afectará a toda la Comunitat Autònoma, esté aprobada en el primer cuatrimestre del próximo año. Recordó asimismo que el Ayuntamiento ha presentado alegaciones al decreto ley estatal por el que, a partir de marzo de 2018 las bolsas de plástico de un solo uso que se repartan en los establecimientos comerciales deberán ser necesariamente de pago y su uso va a estar prohibido en 2020. La entrada en vigor de la obligatoriedad del pago de las bolsas no tendrá mucha repercusión, puesto que desde hace años los principales comercios y las grandes superficies ya las cobran.

La alegación municipal, que no se ha retirado, insta al Gobierno central a prohibir su uso en enero de 2019 fecha que coincidiría, si finalmente se aprueba, con la normativa autonómica y local.

El presidente de Afedeco ha manifestado que son plenamente conscientes de la necesidad de reducir el uso de las bolsas de plástico de un solo uso por sus efectos medioambientales negativos, por lo que consideran que si se aplaza la prohibición un año sus asociados pueden asumirlo, puesto que eso es lo que solicitaban tanto en las alegaciones presentadas a la ordenanza municipal como en el contencioso administrativo que ahora se retira.

Ballester manifestó asimismo la voluntad de su asociación de colaborar con el Ayuntamiento para hacer efectiva la eliminación de las bolsas y para concienciar a los comerciantes para que se impliquen con esta medida. De esta forma, manifestó que "una vez establecido un nuevo plazo de aplicación y ampliado el tiempo de transición, "nuestra voluntad es la de contribuir a reducir estas bolsas y respetar el medio ambiente".

Por su parte, Truyol recordó el importante impacto que provocan en el medio ambiente la utilización de las bolsas de plástico de un solo uso ya que, solo en Europa, se calcula que se consumen cien mil millones de unidades, que tardan entre 100 y 500 años en degradarse.

En Palma cada familia consume anualmente una media de 500 bolsas, lo que supone más de 40 al mes. Además el porcentaje de reciclaje de este material es muy bajo ya que se calcula que solo e reutilizan un 10%, de ahí la necesidad de reducir drásticamente su utilización.