Antoni Noguera, alcalde de Palma, justificó ayer la entrega de ayudas económicas directas de hasta 1.000 euros mensuales a los vecinos de Son Banya para poder acabar con "el gran supermercado de la droga" y con el problema del absentismo escolar de la población infantil del poblado. "No queremos mirar hacia otro lado", comentó en nombre del equipo de gobierno municipal.

"No se trata de comparar", dijo al ser preguntado por posibles agravios comparativos con familias de otras barriadas, en referencia a la cantidad que se dará a estas personas para que se instalen en otra zona, fuera de Son Banya. "En 2016, el Ayuntamiento dio el mayor número de ayudas económicas urgentes de su historia, creó la oficina antidesahucios, prioriza a las personas. Estamos haciendo lo posible por ayudar a la gente", añadió Noguera sobre esta cuestión.

El alcalde manifestó su confianza en poder encontrar vivienda para las 15 familias que deben abandonar el poblado. "Se puede encontrar solución", añadió. La fórmula para conseguir viviendas será mixta, según explicó, ya que se recurrirá al mercado de alquiler y al Ibavi. Noguera remarcó que la existencia de Son Banya y el negocio de la droga "ha frustrado el proyecto de vida de muchas personas de Mallorca".