El ayuntamiento de Palma presentó ayer las alegaciones del auto dictado por el Juzgado Contencioso Administrativo con el que se suspendió el acuerdo de Junta de Gobierno de continuar por vía urgente el expediente de demolición del monumento de sa Feixina. La solicitud de las medidas cautelares fue formulada por ARCA (Associació per a la Revitalitzaciódels Centres Antics). Entre algunas de las alegaciones que se presentaron, se justifica que no se puede acreditar el punto donde ARCA afirmó que el monumento forma parte del conjunto histórico-artístico de la ciudad, porque el Consell decidió no proteger el monumento, también se justifica la decisión de retomar el procedimiento por vía urgente porque el expediente estuvo parado durante un año. El consistorio también hizo referencia al argumento de la asociación donde se dijo que el acuerdo vulnera la Ley de Memoria Histórica, ya que aseguran que es precisamente esta ley la que ampara y motiva el acuerdo.