"Las asociaciones, y especialmente las entidades vecinales, están recuperando fuerza tras las políticas que está poniendo en marcha este Ayuntamiento, recuperando muchas subvenciones perdidas y facilitando espacios de comunicación y participación entre la administración y los ciudadanos", tal como destacó ayer la regidora de Participación Ciudadana, Eva Frade, quien añadió que el número ha aumentado tras la crisis. En Palma existen 616 asociaciones de diferentes tipologías, la mayoría de ellas (85) vecinales, que están inscritas en el Registro Municipal de Entidades Ciudadanas (REMEC).
Frade presentó ayer los resultados del estudio elaborado por su área a partir de los datos que proporciona el REMEC. Según explicó, el informe ayuda a conocer la evolución, situación actual, tipología, características, funcionamiento y actividades que realizan las entidades de Palma con el fin de aplicar medidas políticas a favor de la cohesión social. Tras las 85 asociaciones vecinales registradas, las culturales suman 70, y las que atienden a colectivos específicos, 64.
"Esto nos indica que las entidades vecinales continúan luchando por sus barrios, que la cultura está muy viva y que hay un volumen muy grande de colectivos en exclusión que son atendidos por entidades sociales o que se organizan ellos mismos", defendió. En cuanto a las actividades organizadas, las que tienen más volumen son las vecinales y culturales, seguidas de las entidades de personas mayores.
En el caso de las vecinales, sus actuaciones se centran en dinamizar, defender y mejorar la barriada, y en la participación ciudadana. Estas entidades han podido mejorar sus actividades gracias también a un incremento de sus presupuestos.
Las culturales buscan entre sus actuaciones la defensa de la lengua, del patrimonio y de la cultura de Palma y de Mallorca, mientras que las entidades de personas mayores realizan actividades relacionadas con el ocio y servicios culturales. Además, la concejala de Participación Ciudadana de Cort apuntó que las mujeres también están infrarrepresentadas en el tejido asociativo, por lo que es necesario "seguir impulsando políticas feministas para avanzar en igualdad".
