Un bulevar verde, con flora típica de torrente y menos tráfico rodado es lo que los alcaldes de Palma y Llucmajor quieren para la zona del tramo final del Torrent dels Jueus, que marca la frontera entre los dos municipios en el Arenal. El proyecto tiene un presupuesto de dos millones de euros y ha sido presentado por el ayuntamiento llucmajorer, con el apoyo de Cort, para que sea financiado con la recaudación del impuesto turístico del Govern.
Según esta propuesta, la calle Fita, dividida a lo largo por el torrente, será reformada y el tráfico de coches en esta zona se limitará a los residentes.
Además, el cauce del Torrent dels Jueus se reformará de manera que un tercio de la actual superficie hormigonada sea de tierra, donde se plantarán juncos y cañas. De este modo, se pretende crear un "corredor ecológico y urbano", en palabras de Antoni Noguera, alcalde de Palma.
La información facilitada por el consistorio detalla que la reforma abarca unos 400 metros longitudinales y una amplitud de 30 metros, en los que se incluyen el lecho del torrente y sus márgenes, además de la intersección con las calles transversales que lo cruzan y también la conexión con el paseo marítimo y la playa.
La obra, de conseguir la financiación necesaria, comenzaría a finales de 2018, pero Noguera remarcó que "el próximo verano tiene que ser un punto de inflexión en la Platja de Palma". "Es muy necesario mejorar el paisaje urbano y la zona turística", añadió el alcalde.
Zona turística degradada
En esa línea, tanto Noguera como su homólogo en Llucmajor, Bernadí Vives, comentaron que el proyecto servirá para mejorar una zona turística "madura" y "degradada". "Pedimos a los hoteles que mejoren su planta para combatir el turismo de borrachera", mencionó Vives, por lo que los dos ayuntamientos se hacen responsables de "mejorar el entorno", ya que, de otro modo, "no tendría sentido", añadió.
Con la reforma del Torrent dels Jueus, Vives confía en que "cambiará la fisonomía de la zona" y las condiciones de vida de sus residentes.
Junto al torrente, ambos alcaldes presentaron ayer el proyecto y explicaron la razón de su colaboración: "La mejor manera de hacer presión y conseguir el embellecimiento de la zona es hacerlo conjuntamente", comentó Bernadí Vives.
"Nadie entendería que una zona turística madura como es la nuestra no tenga apoyo para este proyecto", mencionó Noguera sobre esta reforma. El alcalde de Palma avanzó que esta colaboración entre los dos municipios tiene "vocación de continuidad y de futuro".
