La fotografía de la derecha es de la plaza Antoni Albert i Nieto, en Eivissa, en la que se han instalado dos grandes toldos, amarrados a cuatro postes, para crear sombra sobre los juegos infantiles.

Además, se ha aprovechado la zona que lo rodea para habilitar terrazas de bares y cafeterías, de forma que los padres pueden estar tomando algo al mismo tiempo que vigilan a sus hijos.