Una nueva proposición del PP sobre venta ambulante en la que este partido pretedía que Cort condenase esta actividad ilegal por el perjuicio que ocasiona al pequeño comercio y la mala imagan que trasmite del municipio, fue rechazada por el equipo de gobierno, aunque finalmente se alcanzó un acuerdo entre todos los grupos, que fue aprobado por unanimidad. En él, el equipo de gobierno, tras reiterar su compromiso en la defensa del pequeño comercio, se compromete también a "dialogar, buscar el consenso y hacer partícipes a la asociaciones de comerciantes locales y otras entidades, de los futuros cambios en las ordenanzas". Asimismo, se continuarán realizando campañas destinadas a informar de los riesgos de adquirir productos falsificados, además de "trabajar en protocolos sociales para dar una salida laboral y social a las personas que se ven obligadas, por necesidad", a esta actividad sin licencia. El concejal del PP Fernando Rubio afirmó que existen discrepancias en el equipo de gobierno porque el PSOE quiere mantener la prohibición de la venta en la ordenanza de ocupación, mientras que Podemos la quiere suprimir.