La futura edificación de viviendas de nivel medio-alto en Nou Llevant va a tener el correspondiente impacto sobre el tejido social de una barriada de Palma tan tradicional como La Soledat, según reconocen representantes del sector inmobiliario.

Hay que recordar que ambas zonas son limítrofes, y la instalación de nuevos residentes de alto poder adquisitivo en zonas de población más humilde ha ido acompañada en numerosas ocasiones de una modificación del tejido social, e incluso se ha llegado a procesos de gentrificación: una clase alta aumenta su demanda de propiedades en una zona humilde, hace que sus precios se eleven, y termina expulsando a la población tradicional de la zona.

Precedentes en Palma

Como referencia, se han dado estas situaciones en sa Gerreria, Es Molinar y, más recientemente, en Santa Catalina, por citar algunos de los ejemplos más conocidos en Palma.

Desde el sector inmobiliario se descartan cambios en las características de la zona más próxima al Parc Krekovic, donde se encuentran las altas edificaciones de las viviendas de protección oficial, pero sí se apuntan posibles efectos sobre las calles de La Soledat más próximas a los espacios de Nou Llevant que ahora se quieren desarrollar urbanísticamente, y que se caracterizan por edificaciones de baja altura y contrucción más tradicional.

Hay que tener en cuenta que también espacios cercanos están registrando procesos de revalorización de sus propiedades, tanto residenciales como de locales, tal y como se ha venido apuntando desde colectivos como el de agentes de la propiedad inmobiliaria, como es la zona próxima al Palacio de Congresos.