La posidonia es una especie protegida, que en teoría debería permanecer en las playas y no retirarse. Pero cuando su acumulación se transforma en un problema de salubridad, se permite su retirada. Una vez recogida, ya sea por Emaya o por las empresas concesionarias del mantenimiento de las playas, los payeses hacen uso de esta planta, una vez desecada, aunque de manera no regular. Por ello, el área de Ecología, Agricultura y Bienestar Animal de Palma ya ha sentado las bases para que los excedentes de posidonia puedan ser distribuidos gratuitamente a los payeses.

La intención de Josep Maria Rigo, coordinador del área municipal competente, es que la próxima primavera haya un punto de almacenaje y distribución regular de la posidonia que se haya retirado de las playas de Palma. Queda por definir el lugar donde se ubicaría, pero de esta manera los payeses podrían acudir a recoger esta planta que, una vez desecada, es utilizada en el campo por sus propiedades, tanto por humedecer y ablandar la tierra, como para lecho para las vacas.

El proyecto de Cort estará condicionado por el decreto de posidonia que prepara el Govern, remarca Rigo. De momento, las cuatro empresas concesionarias de las playas que han renovado el contrato ya han aceptado las nuevas condiciones y el "código de buenas prácticas" en relación a la especie protegida, informa el coordinador general de Ecología. Es decir, tienen que retirar la planta con medios no agresivos y nunca si se prevé un temporal. Según Rigo, el Ayuntamiento ha dejado abierta la posibilidad de controlar y centralizar la recogida de posidonia, el primer paso para crear ese punto de distribución para los payeses.

De esta forma, añade el coordinador general de Ecología, Agricultura y Bienestar Animal, además de dinamizar el sector agrícola, se "evitan malas prácticas, como que se pueda vender".

Sobre esta posibilidad, por parte de los payeses, este diario ha podido saber que en estos momentos se paga a la empresa que realiza el transporte de la posidonia hasta la explotación agraria. La utilización de la planta desecada es una costumbre que nunca se ha perdido y que antes se transportaba a las fincas agrícolas en carro. "La idea es que sea gratuito, que ellos vengan a buscar la posidonia", explica Josep Maria Rigo sobre el proyecto.

Responsables de la retirada

En la actualidad, Emaya se hace cargo de la retirada de la posidonia de Cala Gamba y de Son Callos, la playa junto a Puro Beach. Precisamente el estado de esta cala y su recuperación es una cuestión que el Ayuntamiento ha planteado a Demarcación de Costas, para que evalúe la mejor solución.

Rigo remarca que en invierno no está permitido retirar esta planta, excepto por razones de salubridad, pero también reconoce que hay un cierto "vacío" sobre qué tipo de residuo es la posidonia. La última campaña de recogida en Cala Gamba sumó 1.100 toneladas, por lo que la cantidad resultante de todas las playas multiplicaría esta cifra, estima el coordinador.

La empresa Marportsunbeach Mca S.L. se hace cargo de la limpieza de Can Pere Antoni, Playa Tikaran S.L., de Cala Estancia, Venticalama S.L., de Ciutat Jardí; Beach i Oci S.L. lo hace de Cala Major, y Mar de Mallorca S.A. se encarga de Platja de Palma.