Para "evitar la saturación turística", Cort pone a prueba tres puntos más de descarga de turistas ante la "buena acogida" que obtuvo el 2016 la situada en Eusebio Estada. Se trata de aliviar el Moll Vell como principal zona de recogida de las masas de turistas que llegan a Palma desde ese punto. También, la reordenación de los flujos de entrada de visitantes que solo se ha aplicado a los cruceristas, se amplía ahora a turistas en general.

Los nuevos puntos de recogida están en el Parc de la Feixina, en la avenida Portugal y en la calle Joan Maragall.

"Los turistas son bienvenidos, pero se ha de ordenar y evitar la saturación y parar la concentración", expresa el alcalde José Hila, poco dado, hasta la fecha, a reconocer que Palma, sobre todo el centro, es una ciudad saturada por la presión turística.

Cort, que ha contado con el apoyo del sector, desde Autoridad Portuaria, a las empresas de transporte discrecional, Aviba, la asociación de guías turísticos y los consignatarios de cruceros, cree que las empresas mantendrán su compromiso y no boicotearán esta medida que, por el momento, es un ensayo.

"Creo que lo van a utilizar. No podemos fijar cuotas, ponemos puntos de descarga y vamos a ver cómo responde el sector. En cualquier caso no soy partidario de prohibir descargas en el Moll Vell".