"Me echaron del piso para hacer negocio", explicaba ayer Víctor Núñez. "Hemos tenido un piso turístico en nuestra comunidad, y un hijo nuestro que se quiere independizar no puede pagar un alquiler", argumentaba Rosa María Mas. "En el Molinar, no queda ni un solo piso de alquiler", denunciaba Magdalena Barceló. Los tres se sumaron ayer a las más de 200 personas que participaron en la inauguración del carril guiri, organizado por la plataforma 'Ciutat per a qui l'habita, no per a qui la visita'.

El código de vestimenta lo cumplían todos los presentes: ropa de turista, maleta con ruedas y algo para hacer ruido. El punto de encuentro fue la plaza de Cort, al mediodía, y de allí partieron hacia Jaume II, plaza Major, plaza de'n Coll, y, finalmente, alargaron el recorrido hasta la plaza Quadrado, donde el GOB preparaba su entrega de premios. De hecho, algunos de sus integrantes más conocidos, como Macià Blázquez y Margalida Ramis, además del doctor en Geografía por la UIB, Ivan Murray, participaron en el carril guiri. También se dejaron ver Nina Parrón, directora de Igualdad del Consell, y el director general de Participación Ciudadana de Cort, Joaquín Maria Arrebola.

Con humor

Los 'guiris' palmesanos despertaron por igual el asombro de los turistas como los aplausos. Hubo momentos en que los locales se confundían con los visitantes que arrastraban sus maletas. "Paella, paella..." y "Balconing" fueron algunas de las proclamas.

Manel Domènech, presidente de los vecinos de Canamunt i Ciutat Antiga, interpretó a un crucerista extranjero estresado por querer ver todo en una sola mañana. "Dicen que vivimos del turismo, y lo que hacemos es malvivir", denunció ya seriamente Domènech, una vez acabada la parodia.

Algunos turistas, como la señora inglesa a la que Magdalena Barceló pidió " Please, don't come", dijo entender su petición, ya que en su población de origen tenían el mismo problema. La vecina del Molinar, que se definió como un "comando individual autogestionado", porque en su día a día aborda de igual manera a los turistas, denunció: "Hoy somos más pobres que nunca, el dinero se lo llevan los de fuera". "El problema es que el puerto y el aeropuerto los controla Madrid", añadió. También mostró su profunda decepción con la gestión de Més y Podemos: "Si lo que querían eran generar confianza, lo que han hecho es traicionarnos".

Un integrante de la plataforma leyó el manifiesto, en el que se afirmaba que "el centro histórico se está convirtiendo en un gueto de guiris". 'Ciutat per a qui l'habita' anunció nuevas acciones para "recuperar la ciudad de las manos del colonialismo turístico y sus agentes invasores".