Arranca este viernes, a partir de las nueve de la noche, la 27 edición de la Feria de Abril, con menos casetas que en ediciones anteriores (tres frente a las cinco del año pasado) y menos superficie ocupada en el recinto del polígono de Son Rossinyol (7.000 metros cuadrados en lugar de los 35.000 que utilizaba en los años de máximo esplendor).

Organizada por la Casa de Andalucía en Balears, que aporta un presupuesto de 43.000 euros para su celebración, cuenta con la colaboración del Ayuntamiento de Palma, que presta los servicios de mantenimiento, limpieza, vigilancia y bomberos, entre otros, tras la declaración del evento por parte de la junta de gobierno celebrada ayer como de interés municipal. El coste de los servicios que presta el Ayuntamiento ha sido valorado por el alcalde, José Hila, y la concejala de Participación Ciudadana, Eva Frade, en 85.000 euros.

Según explicó el representante de la Casa de Andalucía presente en el acto de presentació de esta nueva edición, José Carrillo, la feria se prolongará hasta el próximo siete de mayo y volverá a contar con la demostración eqüestre de la Policía Local.

La declaración del evento como de interés local permite también establecer unos horarios especiales en función de los días. De esta forma, el recinto permanecerá abierto el viernes entre las 9 de la noche y las cuatro de la madrugada, aunque la música deberá cesar a las 3:30 horas. Los días 29 y 30 y el 5 y 6 de mayo abrirá sus puertas entre las 12:00 horas y las 3:30 de la madrugada, mientras que el resto de días estará abierto hasta la 1:30 horas.

La EMT realizará un servicio especial cada quince minutos entre las 22:15 de la noche hasta las 4:30 de la madrugada los días con un horario más extenso y que partirá de la calle Eusebi Estada, con el fin de facilitar que los ciudadanos que quieran acudir a la feria no tengan que utilizar su vehículo privado.