El Ayuntamiento de Palma prohibirá el alquiler turístico en toda la ciudad con el fin de priorizar el acceso a la vivienda.

Así lo ha señalado el teniente de alcalde de modelo de Ciudad, Antoni Noguera, que ha explicado que lo propondrá a sus socios del equipo de gobierno para su aprobación definitiva en próximas fechas.

Noguera, advirtió además que "el próximo verano, esté o no aprobada la zonificación turística que debe realizar el Ayuntamiento, el alquiler vacacional en viviendas plurifamiliares estará prohibido y los propietarios que lo practiquen se expondrán a unas multas de 40.000 euros".

Aseguró que desde el Ayuntamiento se han tenido contactos con la Conselleria de Turismo con el fin de reforzar la inspección y garantizar que los incumplidodores sean sancionados.

La decisión se produce después de disponer de los primeros resultados de un estudio encargado por la concejalía de Modelo de Ciudad sobre la estrategia a seguir para garantizar el acceso a la vivienda digna frente a ls dinámicas turísticas del alquiler vacacional y otras. En él, entre otras cuestiones, se comprueba que el alquiler vacacional ha dejado el ámbito de la economía colaborativa para pasar a ser un negocio.

Los datos así lo demuestran, puesto que en Palma el 66% de la oferta incluye más de dos pisos y el 32% de operadores comercializan más de 10 viviendas. Además, 15 empresas controlan el 10% de las viviendas turísticas de toda la ciudad, 7 el 15% del centro histórico y 4 el 11% en Santa Catalina

Esta situación afecta a los desahucios por impago de alquileres, puesto que, de 2015 a 2016 se ha incrementado en un 67% los lanzamientos por esta causa. Asimismo, el precio medio del incremento del alquiler entre 2015 y 2016 ha sido de un 7,4%, el porcentaje más alto de España, y el precio medio por metro cuadrado de alquiler ha experimentado en un año un aumento del 40%, pasando de 7,9 euros por metro cuadrado a 11 euros por metro cuadrado.

Del estudio se desprende que en área metropolitana de Palma existen en estos momentos 3.191 viviendas que se destinan al alquiler vacacional, lo que supone 21.216 plazas, el 69,8 del total de la oferta turística de la ciudad,

En relación a la oferta de hoteles de ciudad, se comprueba que, en el último año, se han sustituido en el centro 116 viviendas por plazas turísticas en estos establecimientos, cuyas plazas han pasado en el último año de 2.145 a 2.838 y cuyo número pasará de 38 a 69 cuando se ejecuten todas las licencias concedidas en este momento. Por ello, Noguera anunció la necesidad de una regulación, aunque no es partidario de la moratoria de tres años solicitada por la Federación d'Associacions de Veïns de Palma.