A la misma hora que en Palma el concejal de Infraestructuras Rodrigo A. Romero reunía a hoteleros, restauradores, vecinos para apaciguar los ánimos ante sus quejas por el sistema de alumbrado de la Platja de Palma, que les deja a media luz, algunos operarios trabajaban ayer a pleno sol rematando detalles de los balnearios que este año han sido sometidos a una pequeña intervención de embellecimiento. Los turistas se paseaban o cedían sus cuerpos al sol.
Cort ha tomado una medida "provisional" para paliar la sensación "de inseguridad" que padecen en la zona al caer la tarde. Se van a instalar 150 focos led de luz blanca a lo largo de 2,5 kilómetros de costa. Los trabajos de mejora del alumbrado concluirán antes del 15 de mayo, coincidiendo con el inicio de la temporada turística.
Estos focos se colocarán en las luminarias con base de hormigón que, veinte años tras su colocación, están obsoletas. Este foco led se suma así a las tres luces ya incorporadas en estas viejas 'farolas' pero se colocará dirigido hacia la playa, la zona más vulnerable que hasta la fecha estaba casi a oscuras.
En las últimas semanas, los distintos sectores económicos ya habían hecho llegar a Cort sus quejas por el sistema de iluminación de una zona en la que desde la esfera privada se está invirtiendo mucho dinero en renovar su planta hotelera. Incluso el Ayuntamiento se suma colaborador en la iniciativa Palma Beach, que busca promocionar este destino de sol y playa con un plus de calidad.
"Somos conscientes de que la solución es provisional pero queremos tomarnos el tiempo necesario para que junto al Consorcio de la Platja de Palma se elabore un proyecto de remodelación del alumbrado de la zona. Queremos que sea un proyecto participativo y emblemático", explicó el regidor de Infraestructuras Romero.
Pedro Marí estuvo en la reunión para dar luz a la Platja de Palma. El delegado de zona de los restauradores asume que "la solución no es bonita porque ese foco de luz led blanca junto a los tres focos antiguos de luz amarilla, no quedará muy logrado, pero preferimos esta solución temporal a seguir preocupados por la falta de seguridad que se crea en una zona turística tan visitada".
La Platja de Palma aún no está preparada para el baile de gala, aunque son numerosos los turistas que ya la han elegido como destino de sus vacaciones.
Desde la Oficina de Turismo cercana al balneario 4, que aún permanece cerrado y se ve a dos operarios rellenando de cantos rodados el perímetro del local para otorgarles un cierto aire de chill out, se señala que "sí, que hay más turismo que el año pasado por estas fechas", asegura Marga.
Faltan baños públicos
La mañana ha sido provechosa. En poco más de tres horas, ya se habían acercado 41 personas. Preguntas sobre horarios de autobuses y rutas ciclistas son las más frecuentes.
La falta de baños públicos es la queja más repetida. "Se lo dije al alcalde José Hila, y me contestó que en Palma ocurre igual. Me aseguró que hay interés en el tema pero que no está entre las previsiones inmediatas", cuenta Marga desde la Oficina de Turismo.
"Con la apertura de los balnearios el problema se irá solucionando", indica. Pero aún les quedan unas semanas de trabajo. De los 15 de la Platja de Palma, se han reformado ocho este año. El resto, tendrá que esperar a 2018.
