El área de Movilidad de Cort se comprometió ayer con la Associació per a la Revitalització dels Centres Antics (Arca) a consultar con la Dirección General de Tráfico la posibilidad de reducir el tamaño de las señales viarias verticales y de los vados permanentes en el centro histórico de Palma, siempre dentro de la normativa, e incluirlo así en el próximo contrato de señalización.

En esta reunión, convocada tras la denuncia pública de Arca sobre las rayas amarillas que se estaban pintando en la calle Almudaina, Movilidad también se comprometió a revisar de oficio toda la señalización existente para eliminar reiteraciones. En este punto, informó ayer el Ayuntamiento, se empezará por las Acire (áreas de circulación restringida a residentes).

Otro de los compromisos adoptados por parte del Ayuntamiento es realizar una consulta legal para saber si se puede utilizar una señalización más general que evite el exceso de indicaciones en el centro.

El último punto planteado por el área de Movilidad es intentar eliminar las rayas amarillas ya pintadas en la calle Almudaina.

Por su parte, y antes de esta reunión, Arca ya había anunciado que pediría un trato acorde con la declaración de BIC del centro histórico de la ciudad.