El nuevo Plan General de Ordenación Urbana de Palma debe prever el incremento de al menos un 10% del actual parque de viviendas sociales con el fin de poder atender tanto la demanda actual como la que se genere dentro de 15 o 20 años.
Así lo explicó ayer el teniente de alcalde de Modelo de Ciudad, Antoni Noguera, quien señaló que, en la actualidad, de las 150.000 viviendas existentes en la ciudad, tan solo un 1% (1.500) son de alquiler social. Por ello, aseguró que el reto del nuevo planeamiento urbanístico consiste en conseguir incrementar este parque en al menos un 10%, lo que supondrían 15.000 viviendas sociales.
Y ello sin consumir más territorio, puesto que uno de los objetivos del Plan consiste también el de "crecimiento cero". De esta forma, entre las políticas que se pretenden impulsar, se incluye el fomento de la obtención de suelo público, flexibilizar los usos en los equipamientos para que en determinadas circunstancias también admitan residencias, destinar todos los solares que adquiera el Ayuntamiento en compensación cuando se ejecutan urbanizaciones a vivienda pública y plantear usos mixtos en solares en los que se permita el uso residencial con equipamientos sociales.
También cabe la posibilidad de incrementar las densidades de población permitidas actualmente en barriadas poco pobladas, aunque Noguera precisó que esta cuestión depende de que el Consell de Mallorca esté dispuesto a cambiar algunos aspectos del Plan Territorial o de las Directrices de Ordenación territorial.
La ejecución de estas viviendas podría ser pública o privada, aunque la mayoría de ellas deben ser en régimen de alquiler, aunque no se descarta que se puedan autorizar promociones privadas.
En relación a la problemática de la vivienda existente en Palma debido a la crisis, la concejala de Bienestar Social, Mercè Borràs, ha manifestado que su departamento ha realizado un esfuerzo importante en materia de ayudas ya que éstas se han prácticamente triplicado el pasado año en relación a 2012.
De esta forma, en 2012 se concedieron 463.000 euros para el pago de alquileres, recibos de luz, entradas para acceder a una casa, pensiones y habitaciones y residencias para personas mayores, mientras que el año pasado las ayudas ascendieron a 1.328.000 euros.
Asimismo, el teniente de alcalde explicó que Modelo de Ciudad también se gastó el año pasado casi un millón más en ayudas a la rehabilitación de edificios, para los alquileares de pisos incluidos el en programa palma Habitada y en la puesta a punto de las viviendas que el Patronato Municipal de l'Habitatge tenía en desuso.
En relación a este punto Noguera pidió que el IBAVI, dependiente del Govern, se implique más en esta cuestión y, por ejemplo, rehabilite las 20 viviendas que tiene cerradas en el Camp Rodó, entre otras.
