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Mujeres de hoy

Tete Crespí Bennássar: "Detrás de un nórdico que compra, hay un mallorquín que vende"

La directora de la agencia Monapart Palma cuenta cómo se asociaron con la 'casa madre' en Barcelona

Tete Crespí es la directora de Monapart Palma. B. Ramon

La llaman Tete. Es la tercera de cinco hermanas. Es madre de dos hijas. Dirige Monapart Palma, la agencia inmobiliaria que

Tete Crespí Bennàssar se alimentó con biberones cargados de publicidad. Su padre fue el creador de la agencia IZY; después ampliaría el campo profesional al abrir la escuela de diseño Tracor en Palma, una de las primeras. "No fui a estudiar fuera porque aprendí en casa. Luego sí me trasladaría a Barcelona, donde viví diez años trabajando en distintas agencias de comunicación. Conocí a mi marido, el arquitecto Joan Cerdà y montamos Niu, un despacho de arquitectura, donde yo me encargué del diseño. Regresamos a Palma atraídos por la calidad de vida, pero si he de ser sincera, vivo aquí porque soy de Palma pero me gustan más las grandes ciudades. Soy urbanita", relata.

-Y de la arquitectura y diseño a la venta de casas. ¿Cómo se introdujeron en Monapart, una agencia de Barcelona creada por un arquitecto, un periodista y una abogada?

-Sus creadores se conocieron haciendo un master en Esade. Ahí vieron que el concepto de inmobiliaria debía adaptarse a los nuevos tiempos. Es fundamental que haya arquitectos porque aportan un valor añadido a la agencia. A Monapart les ofrecimos convertirlo en franquicia, y tras un año de negociaciones, dijeron que sí. Ahora hay en más ciudades, y está en expansión.

-¿Qué las diferencia de otras inmobiliarias?

-La venta de una casa es la transacción más importante en la vida de una persona, por ello es muy importante el rigor y la honestidad. Ofrecer una casa a precio de mercado, bien valorada, bien presentada, por un equipo de profesionales es fundamental.

-¿Está insinuando que las inmobiliarias dan gato por liebre?

-En absoluto, no me atrevería a afimar algo así, pero sin querer hablar mal sí que pienso que a algunas les falta rigor. El precio es muy variable, el sector vende por aproximación. Nosotros trabajamos con valoraciones reales. Un ejemplo: no es lo mismo vender una casa en la zona de la catedral que en sa Gerreria, y algunas agencias, ofertan estas viviendas igual. Una calle lo cambia todo. No puede tener el mismo precio una casa en Palau Reial que en una calle más pequeña, lateral...

-¿Qué diferencia a Monapart de las otras agencias?

-Nosotros vendemos un estilo de vida, somos además una agencia local, cuidamos al mallorquín, y filtramos mucho, trabajamos en exclusiva.

-Y con precios que no bajan de los 250.000 euros.

-Es que lo más económico se ha vendido todo! En Barcelona hay precios más económicos porque hay más producto."El alquiler vacacional ha sido positivo pero la codicia está provocando situaciones inadmisibles"

-¿Está agotado el mercado en Palma, una ciudad que parece estar en venta y/o en alquiler?

-Vivimos un momento muy caótico. Hay una gran demanda, se ha vuelto a la ciudad y el extranjero ha puesto en valor zonas como el centro histórico, el Portixol, que el mallorquín abandonó o no cuidó porque no le dio valor. Ante un nórdico que compra, hay un mallorquín que vende, pero ojo, que muchos locales creen que los suecos son tontos. Ellos pagan caro si el producto es bueno. El cliente que piensa que puede enriquecerse por el boom nórdico no nos interesa. El que ofrece su casa a un montón de inmobiliarias desvirtua el mercado, pierde valor, porque acaba dando un precio incorrecto. En Monapart nos interesa vender a un precio ajustado al valor real de la vivienda.

-Pero el que vende su casa, la "transacción más importante en la vida de una persona", como bien dice usted, quiere sacar el máximo provecho. Muchos prefieren vender sin intermediario.

-Es cierto que el regateo está muy arraigado en nuestra cultura y que la gente se quiere quitar de encima al intermediario. Nosotros creemos que es necesario hacer pedagogía de nuestro oficio. Nosotros no competimos con inmobiliarias, trabajamos el producto desde el principio al final, abrimos una ficha exhaustiva de la casa, con tasaciones reales hechas por arquitectos. No somos una agencia safari.

-¿Un tour para ir a 'cazar casas'?

-Más o menos. A algunas inmobiliarias no les importa enseñar sus productos con el propietario dentro. Nosotros, jamás.

-¿Están hinchados los precios en Palma, especialmente en zonas como el centro histórico, Santa Catalina, Son Espanyolet?

-Aunque no nos movemos en el terreno de palacetes, creo que en líneas generales se están vendiendo casas por un precio que no corresponde. En mi opinión el problema es la baja calidad del producto. Hay poca vivienda en zonas de gran demanda, y algunos quieren hacer su agosto, hinchan precios. ¡Pedir 10.000 euros por metro cuadrado en sa Gerreria frente a un comedor social eso es absurdo! Prefiero al propietario sin expectativas absurdas, pero repito, ese no es nuestro cliente.

-La realidad es que muchos propietarios han invertido para lucrarse con el alquiler vacacional, provocando la marcha forzosa del inquilino local con menor poder adquisitivo. ¿Qué opinión le merece la normativa, aún sin aprobar, del Govern balear?

-Es evidente que debe regularse, dicho eso, también me parece lógico que el mallorquín que tenga muchas propiedades se les de la posibilidad de alquilar porque eso da trabajo, fomenta el crecimiento económico, es positivo. Dicho esto, el que el cliente local no pueda alquilar a precios razonables y tenga que marcharse es terrible. Al final, la codicia puede. La ley, en líneas generales, me parece bastante estricta, pero a la vez debe haber límites. Otra consecuencia es que los barrios acabarán perdiendo autenticidad.

"No quisiera hablar mal de las inmobiliarias pero creo que a muchas de ellas les falta rigor, venden por aproximación y con precios variables"

-Palma está de moda pero por definición, las modas son pasajeras.

-Todo son ciclos, y va a haber resaca, pero mi opinión es que en Palma, todo se mantendrá.

-¿Dónde crecerá Palma?

-No lo sé, detectar la inversión de futuro no es mi función aunque es evidente que la zona del polígono de Llevant, La Soledat. El centro está agotado, Santa Catalina, también. La ciudad crecerá en anillos, en las zonas periféricas. A nosotros nos interesan zonas como Blanquerna, Arxiduc y también apostamos por casas en los pueblos con buenas comunicaciones. Palma como la puerta de entrada a la isla.

-¿La saturación turística liquidará Mallorca?

-No tengo cultura de la queja. Límites sí, pero con cabeza. Con la crisis encima, los precios no bajaron.

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