Era inevitable que ayer la delegada del Gobierno, Maria Salom, y el alcalde de Palma, José Hila, se pronunciaran en relación al requerimiento realizado por la primera a Cort para que anule la denominada carrera profesional que se paga a los funcionarios municipales. Como era de esperar, tanto Salom como Hila mantienen su postura, por lo que al final el alcalde zanjó los argumentos de unos y otros con un "nos veremos en los tribunales".
Una decisión política frente una actuación discriminatoria
Mientras la delegada del Gobierno afirma que la decisión de abonar la carrera profesional a los funcionarios del Ayuntamiento fue "política", no avalada por informes técnicos, el alcalde defiende que el pago de este plus, que fue suspendido en el anterior mandato, tiene que ser reanudado en aplicación de una sentencia judicial que obliga al Ayuntamiento a cumplirla. Además, Hila se quejó de que Salom solo hubiera requerido la suspensión de la carrera profesional en Cort, mientras que otras administraciones como el Govern y el Consell
Un Ayuntamiento con superávit
Además, el alcalde recuerda que el Ayuntamiento cerrará el año con superávit, por lo que considera que no hay motivos para no abonar un derecho que tienen los funcionarios municipales y más teniendo, como insistie en que tienen, los informes favorables.
