El grupo municipal de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Palma ha presentado una proposición para que sea debatida en el próximo pleno municipal en la que se solicita la creación de una red de baños públicos en toda la ciudad.

El concejal de este partido en Cort, Bartomeu Cañellas, en el acto de presentación de esta propuesta, afirmó que "no es de recibo" que una ciudad como Palma, que acoge anualmente a miles de visitantes, no disponga de este servicio que sí tienen las principales ciudades europeas.

Además, estos baños públicos no sólo atenderían las necesidades de los turistas, que ahora, en el mejor de los casos, se ven obligados a usar las instalaciones de bares y comercios para realizar sus necesidades, sino que también cubrirían las de los trabajadores que realizan sus labores en las calles de la ciudad, como los repartidores, taxistas o conductores de autobús, entre otros.

Además, Cañellas explicó que estas instalaciones no tienen por qué ser costosas para las arcas municipales, puesto que se puede implantar mediante la concesión del servicio a una empresa, tal como se está haciendo ahora mismo en Madrid, por ejemplo, ciudad en la que la empresa que tiene la concesión del mobiliario público ha instalado 105 baños.

Indicó también que el coste de este servicio se puede sufragar mediante la concesión de los espacios publicitarios que llevan las instalaciones. Para el usuario el precio que se abona por el servicio oscila entre los 10 y 30 céntimos.

Este concejal explicó asimismo que "no se deben olvidar tampoco las necesidades de las zonas turísticas de la ciudad, en especial las de la Platja de Palma, que, en temporada baja, "recibe una gran cantidad de turismo de la tercera edad, "un sector que necesita con mayor asuidad hacer uso de estas instalaciones". Asimismo, recordó que, en la actualidad, "la oferta de estos servicios es muy amplia y variada", por lo que "los modelos que se escojan pueden adaptarse a cada lugar de la ciudad con una tipología arquitectónica y constructiva específica".

En el pasado mandato el entonces teniente de alcalde de Turismo, Álvaro Gijón, propuso la instalación de baños públicos. Un proyecto que fue abandonado debido a su coste y a las críticas generadas entre distintos colectivos ciudadanos. Se habilitaron los baños de los estacionamientos subterráneos.