El Ayuntamiento de Palma ha recibido hasta el pasado mes de noviembre más de 3.300 quejas de ciudadanos por la presencia de ratas, mosquitos y cucarachas en distintas zonas de la ciudad.

Se trata de un nivel de quejas que desde el departamento de Salud de Cort consideran muy elevado, ya que, según la concejala Antònia Martín, el número de demandas acumuladas, que al final de año probablemente rozarán o superarán las 4.000, está al mismo nivel que Valencia, una ciudad con mucha más población que Palma.

Con el fin de paliar esta situación se ha incrementado para el próximo año el presupuesto de la nueva contrata del servicio de control de plagas en el término municipal hasta el punto de que se prevé duplicar su cuantía, que pasara de los 250.000 euros actuales a 550.000 euros.

Según Martín, puede haber varios factores que influyen en el elevado nivel de quejas de los ciudadanos debido a las elevadas poblaciones de roedores, cucarachas y mosquitos.

Uno de ellos es la extensión territorial de la ciudad, ya que buena parte de las reclamaciones proceden de urbanizaciones situadas en la periferia. También influye la costumbre por parte de los ciudadanos de dejar comida en los parques para los animales.

Según los datos proporcionados por la concejalía, las barriadas que han acumulado más quejas a lo largo del año son las de Pere Garau, Plaça de Toros, la Indioteria y el Nou Llevant, aunque durante el pasado mes de noviembre las quejas se concentraron en Son Cladera y en es Molinar. En estos dos últimos casos se sospecha que ha sido debido a la existencia de alguna circunstancia extraordinaria aún no identificada, según Marín.

En estos momentos el servicio de control de plagas de Cort cuenta con dos equipos. Uno de ellos actúa principalmente sobre las poblaciones de roedores y cucarachas en las redes de alcantarillado del centro de la ciudad y en Foners y el otro realiza actuaciones en los centros escolares de la ciudad y en las de educación infantil. De esta forma, cuando se produce un problema puntual en otras zonas de la ciudad estos equipos deben dejar de realizar el trabajo encomendado para acudir a la emergencia. Las actuaciones contra las poblaciones de cucarachas y ratas se realizan habitualmente al mismo tiempo.

En el caso de los mosquitos, desde Salud consideran que la atención actual a la población es insuficiente. Prueba de ello es que tienen muchas quejas. Uno de los problemas detectados es la insuficiente información de la población sobre el mosquito tigre, pese al esfuerzo realizado en este último año en este sentido.

Con el incremento de la partida presupuestaria en los nuevos pliegos de condiciones se incluirá una serie de mejoras, entre las que la concejala señaló que se van a doblar los actuales equipos pasando de dos a cuatro y destinarán uno de ellos exclusivamente a la atención de urgencias y avisos.

Otro equipo se va a especializar en el control de las poblaciones de mosquitos con tratamientos que se van a realizar a lo largo de todo el año y no solo en épocas concretas.

De esta forma se cree que el control de la población de estos insectos podrá ser mucho más efectiva que la actual ya que el mosquito común prolifera en los meses de verano, mientras que la población del denominado tigre (Aedes albopictus) es más habitual en invierno.

Martín recordó que en el caso de este último insecto, además de las molestias que ocasiona su picadura, puede actuar como vector para la transmisión de enfermedades como el dengue, la fiebre amarilla, el virus del Nilo.

Asimismo, en la nueva contrata se incluirán en la revisión todos los centros de Servicios Sociales Municipales.