Es Jonquet tendrá un espacio público de más de 2.500 metros cuadrados en la primera línea del solar Mar i Terra. Se elimina el "muro de cemento" -como lo llamaba la plataforma Salvem es Jonquet- contemplado en el Plan Especial de Protección (PEP) que fue aprobado inicialmente en la pasada legislatura. Las viviendas que la promotora tiene derecho a construir en dicho terreno se edificarán en la parte trasera y con alturas escalonadas. Para evitar un impacto visual en el conjunto histórico declarado Bien de Interés Cultural (BIC), los volúmenes frente a la nueva plaza serán de planta baja más un piso, como en el resto de la primera línea.
El documento que el área de Urbanismo y Modelo de Ciudad concluirá antes de final de año también suprime la superficie comercial y las casi 400 plazas de aparcamiento subterráneo que aprobó el anterior gobierno de Cort. El nuevo PEP no contempla estacionamientos de rotación, sino "las plazas para residentes a las que obliga la normativa, que se ubicarán básicamente debajo de las nuevas edificaciones, y se accederá por la calle Monsenyor Palmer", como detalla el gerente de Urbanismo, Joan Riera. Así se conserva el talud del paseo Marítimo, uno de los requisitos de la declaración BIC que el primer plan no respetaba.
Los arquitectos municipales que están ultimando el PEP se han reunido con los técnicos de Patrimonio del Consell "para consultarles a fin de coordinar el proceso y que este seguimiento facilite la aprobación definitiva del planfacilite la aprobación definitiva del plan", en palabras de Riera. Durante la pasada legislatura, los especialistas de la institución insular tumbaron el documento por la multitud de deficiencias, incoherencias y problemas que había, debido a que no velaba por la preservación del antiguo barrio marinero catalogado como Bien de Interés Cultural.
Con la nueva redacción, "se han buscado soluciones para acomodar el aprovechamiento urbanístico al que tienen derecho los promotores con la declaración BIC para integrarlo de la mejor forma posible en el entorno y evitar tener que indemnizarles", resume el gerente. La propuesta de ordenación volumétrica en el solar Mar i Terra creando alturas escalonadas "permite reducir la superficie edificable alrededor de un 10%, por lo que de este modo no se superarán los 8.000 metros cuadrados".
Para que haya un gran espacio público en primera línea, frente al Molí d'en Garleta y la casa Can Figuerola -la antigua pensión Los Molinos-, no se recuperará el trazado originario de las calles, "ya que sería perjudicial porque habría que construir delante", como explica Riera. Los 2.500 metros cuadrados libres estarán comunicados con otra plaza más pequeña, de unos 800 metros, frente al teatro Mar i Terra.
Las edificaciones más altas, de tres y cuatro plantas, se sitúan en la parte del solar colindante a los inmuebles de gran volumen de la calle Monsenyor Palmer y se salvan las visuales de la estampa tradicional de es Jonquet desde el paseo Marítimo. Como el terreno va descendiendo hacia la zona más occidental, la calle Morenell tendrá construcciones con dos plantas, pero quedarán alineadas con la edificación de una sola planta recién rehabilitada y muy próxima a Can Figuerola, según indica el arquitecto y responsable de Urbanismo de Cort.
Els Rentadors
El otro solar urbano cuyo futuro está pendiente del nuevo plan es el conocido como Els Rentadors, en la parte oriental del barrio. Se construirán dos edificaciones, una detrás del molino de agua con alturas escalonadas y la otra detrás de un inmueble existente próximo a los antiguos lavaderos que dan nombre a este terreno. El presidente de la asociación de vecinos, Pep Balaguer, solicitó a Cort que ambos volúmenes se ubicasen en la parte más alejada de la primera línea para que las visuales hacia la Catedral no se viesen afectadas. Sin embargo, "es totalmente inviable", señala Riera. "Se ha estudiado de forma exhaustiva y no hay espacio, por lo que la edificación cercana a los lavaderos tendrá una planta baja de unos cien metros cuadrados que no interferirá en las visuales y se escalonará hacia atrás con una altura que tampoco afectará a las vistas", según explica.
El plan de protección también contempla retornar los molinos a su estado original, pero Cort aún tiene que "concretar cómo conjugar de la mejor manera los intereses públicos y privados".
