El Consell de Mallorca proyecta desde hace meses la ejecución de un tramo del futuro bulevar de la fachada marítima comprendido entre la calle Manuel Azaña y el torrente Barberá.
Se trata de una actuación de "pacificación del tráfico" para la que el Consell de Mallorca ha destinado 700.000 euros procedentes de los fondos de capitalidad correspondientes al presente año. El proyecto de ejecución, no obstante, aún no está ultimado porque, entre otras cuestiones, la institución supramunicipal consideró que antes se debía hacer un estudio de tráfico de toda el área metropolitana de Palma.
Desde el Consell se asegura que el retraso de las obras, cuya ejecución se prevé en varios meses no se debe a la falta de fondos, sino a la necesidad de realizar el estudio mencionado anteriormente.
Lo cierto es que, para la realización de esta iniciativa, no se han aprovechado los meses en que el Palacio de Congresos y su hotel anexo han estado cerrados por no disponer aún de un gestor, por lo que, previsiblemente, el inicio de estos trabajos, a finales de este año o principios del próximo, coincidirá con la apertura del hotel y del Palacio.
Las obras consistirán en la continuación de la acera situada al lado de tierra desde la calle Manuel Azaña hasta el torrente Barberá. También se procederá a la construcción de la mediana con un nuevo aglomerado y a la reducción del ancho de los carriles, que pasarán de los 3,75 metros actuales, propios de una autovía, a 3 metros. También se ejecutará una nueva conexión entre el Nou Llevant y la barriada del Molinar a la altura de la calle Brotad, que se abrirá a la circulación y permitirá la salida en dirección a Palma y del aeropuerto.
