El IME ha dado otro paso para cumplir la sentencia que les obliga al cierre de la pista polideportiva de Can Baró. El pasado viernes los técnicos retiraron las dos porterías de fútbol sala, tal como ordenaba el juzgado de lo contencioso administrativo número 2 de Palma. Pese a que la pista está clausurada desde principios de semana, las porterías se quitaron para evitar nuevos episodios de vandalismo. Los vecinos denunciaron en reiteradas ocasiones la presencia de jóvenes que saltaban al interior de la pista para jugar a fútbol y armaban jaleo.