El Institut Municipal de l'Esport (IME) ha cerrado la pista de Can Baró en cumplimiento de la sentencia dictada por el juzgado contencioso administrativo 2 de Palma, que ordenaba el cese de la actividad deportiva por los ruidos que producía.

Según ha informado la concejala de Educación y Deportes, Susanna Moll, el IME intenta buscar soluciones para las entidades que utilizaban las pistas: tres escuelas y clubes de patinaje artístico, según detalla en una nota de prensa el Ayuntamiento de Palma.

Ha detallado que la Sociedad Municipal de Aparcamientos y Proyectos (SMAP) propietaria de la pista; el IME, Actividades (Urbanismo) y la Policía Local han trabajado para evitar las molestias a los vecinos.

Pero como es imposible insonorizar una pista abierta se ha procedido al cierre, por lo que se quitarán las porterías, como establece la resolución judicial.