La red de suministro de agua potable de Emaya volvió a pinchar ayer. Y sucedió en los mismos barrios donde las tuberías se están rompiendo desde el pasado domingo: el Molinar y el Coll d'en Rabassa.

Por sexto día consecutivo la mitad de los vecinos de ambos barrios sufrieron cortes en el suministro por culpa de dos averías en la misma cañería de distribución. El conducto que pasa por debajo de la calle de Llucmajor se fracturó ayer en dos puntos distintos: a la altura de los números 47 (delante de la oficina de Caixabank) y 166 (a la altura de la Gruta). El agua volvió a fluir a primera hora de la tarde tras sustituir los tramos de tubería que habían reventado.

Emaya sigue sin presentar un plan para una tubería que en los últimos años ha sufrido averías constantes. La solución temporal de la empresa pública es rebajar la presión para prevenir que hoy se produzca de nuevo una rotura en las canalizaciones subterráneas del Molinar y el Coll.