La empresa que restauró la estatua de Antonio Maura hace nueve meses asegura que siguió las órdenes del Ayuntamiento de Palma a la hora de ejecutar las tareas de restauración. Las decisiones técnicas fueron tomadas por el equipo de conservación municipal del departamento de Cultura y Patrimonio de Cort, que lidera la restauradora municipal de la ciudad, Magdalena Rosselló.
Mitra Restaura fue la compañía que ganó el concurso público que el consistorio palmesano realizó el año pasado para la rehabilitación del conjunto escultórico. El responsable de la empresa, Miquel Vidal, asegura que el criterio que le indicaron los funcionarios municipales fue "el de mínima intervención".
Se siguió, explica el especialista, el mismo criterio de restauración de la estatua que se tuvo en cuenta en las últimas décadas a la hora de recuperar los elementos maltrechos de la figura de mármol de la Verdad.
La talla de la mujer que está bajo el pedestal de Maura fue la que sufrió el vandalismo con más dureza. Se quedó sin un trozo de nariz, le rompieron la barbilla, le desaparecieron todos los dedos de la mano izquierda y perdió el antebrazo y la mano derechas. En 1997 la restauraron. En aquel momento ya se había realizado una copia aproximada del brazo a partir de fotografías antiguas, en vez de recurrir al molde a escala 1:3 que se conserva en el Museo Mariano Benlliure de Crevillent (Valencia). Vidal señala que la renovación de los dedos perdidos de la mano izquierda se ejecutó a partir de fotografías de la restauración de los años 90.
Recreado mediante fotos
"Había fotos con una cierta calidad que nos permitían reponer los dedos que faltaban. Es cierto que no eran los dedos originales, pero no teníamos el material para hacer otra cosa. A lo mejor no deberíamos haber hecho esta reconstrucción. El criterio era de mínima intervención. Pero la mano tenía unas espigas metálicas que le salían e intentamos mejorarla", justificó el restaurador.
Vidal se desplazó ayer a la plaza del Mercat de Palma para observar el estado de conservación de la estatua. El restaurador también se puso en contacto con el departamento de Cultura del Ayuntamiento para proponerles "retirar los dedos y dejar la estatua con un muñón amorfo, si tienen que suponer un motivo para la controversia".
Este diario se puso en contacto con el Ayuntamiento de Palma, que no pudo explicar qué criterio se siguió para la restauración del conjunto escultórico, obra de Mariano Benlliure, porque la persona encargada está de vacaciones.
La oferta de Mitra Restaura fue la única que superó todas las fases del concurso público, resuelto en verano de 2015. En la propuesta que realizó la empresa de restauración de patrimonio, se comprometió a "conservar en perfecto estado de limpieza el monumento durante un año, a contar desde el fin del servicio y sin coste alguno para el Ayuntamiento".
Por ello, Vidal se comprometió a limpiar en los próximos días las manchas rojas que tiene la figura de la Verdad, debido a que la restauración está en garantía. Tanto la talla de mármol como la de bronce recibieron un tratamiento antigrafitis durante los trabajos de restauración para que las pintadas no se incrustaran en el poro del mármol.
