Casi un centenar de turistas del crucero más grande del mundo comenzaron ayer la ruta guiada del casco antiguo por la plaza de España. Los cruceristas inician habitualmente el recorrido por el Moll Vell y visitan la Catedral en primer lugar, aunque la naviera Royal Caribbean ha aceptado la propuesta del Ayuntamiento de diversificar los puntos de acceso al centro para no saturarlo, por lo que estos primeros turistas del Harmony of the Seas realizaron la ruta empezando por la plaza de la estatua de Jaume I, siguieron por la calle Sant Miquel, la plaza Major y la de Cort, y finalizaron en la Seu, la Almudaina y s'Hort del Rei, tal como explicó Mario Sennacheribbo, consejero delegado de BC Agency, la empresa consignataria de la importante naviera estadounidense.

Añadió que la idea es repetir el mismo recorrido todos los lunes -el día de escala en Palma del Harmony of the Seas-, siempre y cuando haya un número mínimo de cruceristas que contraten esta visita guiada. Los alrededor de 80 que se apuntaron ayer fueron recogidos por dos autocares, que les trasladaron por la mañana desde el Dique del Oeste hasta la estación de autobuses de la calle Eusebi Estada. Al finalizar dicha ruta, el transporte discrecional les estaba esperando en el camino de la Escollera, en el Moll Vell, para llevarlos de nuevo al barco.

"Cambio positivo"

La iniciativa pionera en Ciutat "ha sido aceptada debido a que es una demanda ciudadana y para la naviera puede ser un cambio positivo, ya que ahora los cruceristas acceden a un lugar que antes no visitaban", según destacó Sennacheribbo. Alabó la predisposición del armador del buque porque "los cruceros y sus excursiones se programan con dos años de antelación", aunque en este caso el cambio se decidió la semana pasada. "Se hizo una prueba piloto con los turistas de un par de autocares y, además de una encuesta de satisfacción, se pidió la opinión a los guías y las azafatas que les acompañaban. El resultado fue positivo, por lo que se optó por continuar", tal como concluyó.

Desde Cort, la concejala de Turismo, Comercio y Trabajo, Joana Maria Adrover, agradeció la decisión de Royal Caribbean y su "rápida respuesta" a una idea planteada por el consistorio en abril, "viendo la magnitud de la temporada turística que habría". La responsable política recordó que se reunieron con las navieras de cruceros para proponerles "repartir el flujo de visitantes por la ciudad" con el fin de apaciguar la saturación que se percibe en el casco antiguo los días en los que coinciden en Palma dos o más buques turísticos.

"A medida que se vaya viendo cómo funciona el nuevo punto de acceso al centro, se establecerá una periodificación" de dichas excursiones, tanto con la naviera que ya las ofrece como con las que se sumen a la iniciativa, en palabras de Adrover, quien sigue en contacto con las demás para estudiar las alternativas.

La regidora destacó que las patronales del pequeño comercio están muy satisfechas con este primer paso, debido a que "el flujo de cruceristas y la riqueza se repartirán por la ciudad, ya que las posibilidades de compra no solo recaerán en determinadas calles y negocios".

El Baluard y los Institutos

La responsable de Turismo de Cort avanzó que están trabajando en "otros puntos de desembarco de visitantes y hay más navieras y consignatarios a los que les han parecido interesantes lugares como al lado del Baluard y junto a la plaza de los Institutos, desde donde también se puede acceder al centro". Aseguró que estas dos opciones "están prácticamente garantizadas" y se podrían poner en funcionamiento "este mes o en septiembre, uno de los meses -además de mayo- con la mayor actividad de cruceros, por lo que iría mejor para la distribución del volumen de pasajeros que visitan Palma", concluyó Adrover.

Estos cambios hacen referencia a los cruceristas que contratan una visita guiada, pero no afectan a los que se desplazan al centro por libre con los autocares que ofrece la empresa consignataria para trasladarles desde el Dique del Oeste, ya que les llevan hasta el camino de la Escollera. Cuando el Harmony of the Seas llegó al puerto de Palma por primera vez, el pasado 13 de junio, una cuarta parte de los 5.600 turistas a bordo contrató una excursión, sobre todo visitas guiadas por el casco antiguo, mientras que el resto del pasaje se desplazó a otros pueblos de Mallorca, se quedó en el barco o recorrió el centro histórico de Ciutat por su cuenta.