La pequeña playa de Son Caios en Cala Estància, muy próxima a Can Pastilla, ha quedado cerrada al baño a causa de un vertido de aguas fecales del Puro Beach.

El servicio de playa detectó el problema ayer por la tarde y de inmediato llamó a la empresa municipal Emaya. Los operarios acudieron a la cala y comprobaron que no había ningún problema con la canalización pública. Tras la inspección se percataron de que las aguas residuales procedían de este establecimiento, tal y como lo explicaron fuentes de Emaya.

Los técnicos hablaron con los responsables, quienes contrataron una empresa para vaciar la fosa séptica, ya que el Seprona, que también se desplazó al lugar, verificó que el vertido se había producido allí.

Emaya ha realizado una analítica del agua para determinar qué medidas adoptar mañana sobre la reapertura de Son Caios.

La zona, cercana al Puro Beach, ha quedado acordonada desde este miércoles por la noche. Según informa el 112 en su cuenta de Twitter, queda prohibido el baño en esta playa hasta que se solucione el problema.