El juez Penalva comunicó ayer un auto, en el que anuncia su decisión de levantar parcialmente el secreto de una parte de la investigación. El magistrado que dirige el juzgado de instrucción número 12 señala que esta investigación, que se inició como consecuencia de la filtración de los exámenes de oficial de la Policía Local de Palma, ha demostrado que se pretendía "crear y asegurar un organigrama corrupto", o en el "mejor de los casos dócil y maleable, desde la base hasta la cima de la pirámide delincuencial". Esta trama, según el juez, "les permitía actuar con absoluta impunidad, tal y como así han venido haciendo durante muchos años, y al mismo tiempo actuar al servicio de determinados políticos y su partido". Esta estructura corrupta dentro de la Policía Local, según insiste el juez, se instrumentalizaría a través de las distintas unidades policiales, como los GAP, UII o Patrulla Verde, "en beneficio de intereses de la más variada índole". Además, el auto detalla que la investigación ha revelado la comisión, por parte de policías, "de múltiples y varios delitos, en algunos de los cuales actuarían en connivencia con responsables municipales".
El juez señala que para asegurar el derecho de defensa, sobre todo de los seis policías que todavía continúan en prisión provisional, en estos momentos se justifica que se levante el secreto, aunque recuerda también que no ha desaparecido todavía el riesgo de "alteración, manipulación y destrucción de pruebas". El juzgado da un mes a los abogados para que pidan diligencias sobre este caso de corrupción.
