Una sentencia del Tribunal Supremo que ya es firme y no puede ser recurrida por el Ayuntamiento de Palma pone en peligro la ejecución del futuro parque urbano que la concejalía de Modelo de Ciudad proyecta en los terrenos el antiguo velódromo de Tirador.
Una de las salas de lo contencioso administrativo del Alto Tribunal ha dado la razón a los propietarios de estos terrenos y les ha estimado el recurso presentado contra el justiprecio aprobado inicialmente tanto por el Ayuntamiento como por el Tribunal Superior de Justicia de Balears multiplicando por un mínimo de siete su valor.
De esta forma, los 1.055.992 euros fijados como justiprecio más los intereses correspondientes que el Ayuntamiento debía abonar a los propietarios para hacerse con la propiedad de los aproximadamente 16.000 metros cuadrados del antiguo velódromo se convertirán en un mínimo de "entre siete y nueve millones".
La sentencia no fija el valor del justiprecio, que deberá determinarse en fase de ejecución, aunque establece el aprovechamiento urbanístico que debe aplicarse a los terrenos afectados por la expropiación, además de la cantidad en euros por metro cuadrado de la superficie resultante.
De esta forma, la Sala hace suyos los argumentos de los recurrentes en relación al aprovechamiento urbanístico que debe aplicarse a los terrenos del antiguo velódromo de Tirador, que se fija en 2,98 metros cuadrados por metro cuadrado en lugar de los 0,5952 metros cuadrados por metro cuadrado incluidos en el justiprecio municipal y aceptado por el Tribunal Superior de Justicia de Balears.
Igualmente, el Alto Tribunal estima que el valor básico de repercusión del suelo debe quedar fijado en 543,72 euros por metro cuadrado. De esta forma, los propietarios estimaban que el valor del justiprecio debía ser de 8.681.528,26 euros y no los 1.055.992 euros fijados en el justiprecio municipal. A esta cantidad hay que añadir otros 566.576 euros del valor de la edificación, además de los intereses de demora correspondientes.
Si bien la sentencia no confirma la cantidad solicitada por los propietarios, sí que anula la sentencia del Tribunal Superior que daba por bueno el justiprecio de un millón de euros y establece que la nueva cantidad deberá ser determinada en ejecución de sentencia tras la práctica de una prueba pericial en la que se fije el aprovechamiento urbanístico aplicable y el valor del suelo por el método residual "en los términos acordados por esta sentencia".
Lo anterior va a suponer un problema para la ejecución del parque urbano previsto, puesto que desde Modelo de Ciudad se daba por hecho que tanto los terrenos del Canódromo como los del Velódromo ya eran de propiedad municipal, ya que se habían abonado los correspondientes justiprecios.
De hecho, la concejalía que dirige el teniente de alcalde Antoni Noguera está elaborando desde hace meses un proyecto para la ejecución de un parque urbano arbolado en los 34.000 metros cuadrados del antiguo Velódromo y del Canódromo, que sustituirá al anteproyecto de Cuña Verde aprobado en 2002 y ejecutado en parte en el denominado parque de sa Riera.
Tal como explicó el teniente de alcalde Antoni Noguera, el nuevo espacio libre público pretende mantener las pistas del antiguo velódromo de Tirador, así como el edificio que fue sede de la sociedad Veloz Sport Balear, obra del arquitecto Bennázar. Se prevé que este edificio se convierta en la nueva sede del distrito municipal de Ponent. El resto de la zona verde, si bien aún no se ha definido su diseño definitivo, se pretende que sirva para el descanso, el paseo y el ocio ciudadano y que tenga continuidad con el resto de la Cuña Verde y del denominado parque lineal de Establiments, que sigue el cauce de sa Riera. Se pretende la siembra masiva de árboles con el fin de combatir el cambio climático con pinos y de almeces.
El arquitecto municipal Francisco Cifuentes está trabajando desde hace meses en la definición de este futuro parque urbano, cuyo proyecto prevé tener listo en septiembre. Se pretendía iniciar de esta forma las primeras actuaciones el próximo año, si bien la financiación todavía no estaba cerrada. Se calculaba que el coste de su ejecución sería "de entre dos y tres millones".
