Inmigrantes de diferentes nacionalidades participaron en la misa de Pentecostés que se celebró ayer en la parroquia de Son Ferriol y estuvo presidida por el obispo de Mallorca, Javier Salinas. El encuentro de fraternidad se convocó con el lema 'Una sola Iglesia, diferentes culturas' y las lecturas y cantos se realizaron en diferentes idiomas, sobre todo castellano e inglés. Una docena de nacionalidades estuvieron representadas, sobre todo de Sudamérica, Europa del Este y China.