Una nueva propuesta, aún no aprobada definitivamente, de la concejalía de la Función Pública que dirige Aurora Jhardi relacionada con la ocupación de la vía pública tiene visos de convertirse en otra medida polémica.

La teniente de alcalde ha propuesto a los comerciantes de la calle Oms la supresión de las terrazas situadas en el centro de esta importante vía peatonal de la ciudad y trasladarlas a los laterales, ocupando la fachada de cada uno de los establecimientos que cuenten con autorización.

Jhardi explica que la propuesta se basa en un informe del deparindica que el pavimento de la calle es más resistente en el centro que en los lados, por lo que los vehículos pesados de suministro, de seguridad y de servicios deberían circular por el centro ahora ocupado en buena medida por las mesas y sillas de las 17 terrazas autorizadas en la calle Oms.

Además, la teniente de alcalde explica que en esta calle los metros cuadrados totales que pueden ser ocupados por las terrazas tienen un tope máximo, por lo que, cuantas más ocupaciones se concedan, se deberá reducir la superficie. Otra de las razones esgrimidas para la realización del cambio consiste en la necesidad de que, por motivos de seguridad, y para que puedan circular sin dificultades los peatones, se debe dejar libre en el centro de la calzada un mínimo de cinco metros. De esta forma las mesas y sillas deberán ocupar un metro o metro y medio en cada uno de los lados de la calle y frente a cada uno de los establecimientos. Según Jhardi, se trata de una propuesta que aún no está cerrada y que ha sido presentada a los comerciantes afectados con el fin de que puedan hacer aportaciones.

Por su parte, el presidente de la asociación de comerciantes de la calle Oms, Mateu Martorell, manifestó que la propuesta ha sido recibida de forma "desigual" por parte de sus asociados, aunque "la mayoría la rechaza".

De todas formas, a raíz de una reunión mantenida ayer con representantes del sector de restauración con el fin de estudiar los posibles cambios en la ordenanza de ocupación de la vía pública, se acordó aplazar un mes la decisión definitiva a la espera de un informe sobre la obligación o no de dejar un metro y medio de espacio libre entre las fachadas de los edificios y las mesas y sillas.