Alrededor de unas 250 personas han acudido al Palau Episcopal este domingo, sobre las 10:30 horas, para bendecir los ramos de olivos y las palmas.

El breve acto presidido por el obispo de Mallorca, Javier Salinas, como cada año se ha realizado en cuatro lenguas: castellano, catalán, inglés y alemán.

Tras la bendición de los ramos, el obispo y los fieles han marchado en procesión hasta la Catedral donde se ha celebrado la misa solemne que recuerda la entrada de Jesús en Jerusalén.