El médico de cabecera que firmó las bajas médicas de los policías locales que están en estos momentos en la cárcel, reconoció ayer ante el juez que suscribió estos documentos sin visitar a los pacientes, entre otras cosas, porque estaban detenidos. Sin embargo aclaró que es una práctica habitual, ya que conocía a estos pacientes y se fiaba de la información que le facilitaron los familiares, que fueron los que tramitaron estos documentos.

El facultativo, que declaró asistido por el abogado Gaspar Oliver, insistió en que el diagnóstico que señaló en todos los documentos, un trastorno adaptativo, fue confirmado después, ya que los policías que están en la cárcel por su implicación en esta trama corrupta están tomando medicación. Con respecto a la ratificación de los documentos de confirmación de la incapacidad laboral transitoria, explicó que antes de firmar comprobaba los informes que redactaban los médicos de la cárcel de Palma. El médico entregó estos documentos al juez y, según él, el diagnóstico que se señala es el mismo que escribió en el momento de tramitar la baja. Explicó que intentó visitar a estos pacientes en la cárcel, pero que no pudo entrar en el centro penitenciario porque no se le autorizó. Por tanto, también confesó que firmó la ratificación de las bajas sin haber visitado a los pacientes.

En su declaración insistió en que también trata a otros policías que están implicados en la trama corrupta. Dijo que a varios de ellos les ha aconsejado que acudan al psiquiatra.