Los comercios, restaurantes y mercados dispondrán de un sistema de recogida puerta a puerta, que se pondrá en funcionamiento antes del cambio de modelo en el centro histórico, en el mes de septiembre de este año. También se aplicará en distintos ejes comerciales de la ciudad como en Aragó, Santa Catalina y Blanquerna.

En los comercios se recogerán diariamente las fracciones de papel, mientras que en los bares y restaurantes y hoteles el cristal, la materia orgánica y el papel se hará de acuerdo con el calendario y el horario pactado con el sector. Se prevé que en otoño también se inicie la recogida selectiva de materia orgánica en los distintos mercados de la ciudad.

Los contenedores soterrados existentes en sa Llotja y en el Puig de Sant Pere continuarán en servicio. Asimismo se prevé que, al menos durante la primera fase, habrá tres ejes con presencia de contenedores de superficie con el fin de facilitar la adaptación de los vecinos al nuevo sistema y proporcionar un mejor servicio. De esta forma, se mantendrían los contenedores en La Rambla, calle Unió y Jaume III, además de en Conqueridor, Sant Francesc, calle Ramón Llull y el Temple. Complementariamente se realizarán cambios en la limpieza viaria del centro histórico que incluirá la ubicación de las papeleras y la frecuencia de las rutas. Se prevé que la implantación del nuevo sistema tenga un coste inicial de 2 millones a los que hay que añadir 1,5 más de mantenimiento.