El Ayuntamiento de Palma ha propuesto hoy a vecinos, entidades y comercios del centro de la ciudad la recogida selectiva móvil de residuos, con ocasión de la reunión que ha mantenido esta tarde con los residentes de la zona, ha informado el consistorio en un comunicado.
En concreto, se propone la recogida selectiva móvil, que a diferencia de cómo se aplica en otros lugares, incorpora la recogida "puerta a puerta" en los establecimientos comerciales y de restauración, así como elementos del sistema "puerta a puerta" de la recogida doméstica.
Con el sistema propuesto, la Empresa Municipal de Aguas y Alcantarillado (EMAYA) pretende alcanzar los objetivos de incrementar "considerablemente" el porcentaje de recogida selectiva, incorporar la recogida de materia orgánica e implantar sistemas que permitan la identificación de las personas que depositan los residuos, bonificando así a quienes "segreguen correctamente" sus residuos.
Este sistema se propone para 9 barrios del casco histórico con calles estrechas y callejones y donde residen 12.000 personas: Puig de Sant Pere, la Llonja-Es Born, Sant Jaume, Sant Nicolau, Cort, la Seu, Monti-Sion, la Calatrava y una parte de Sindicat.
Se excluyen las barriadas de Jaume III, plaça dels Patins y la Missió, el Mercat y parte del barrio de Sindicat, la más cercada a Avingudes.
En estos lugares se continuaría utilizando el sistema habitual de contenedores de superficie ya existentes, que se renovarán más adelante.
La reunión de representantes municipales ha contado con la participación de entidades sociales -vecinales, ecologistas, juveniles, tercera edad-, partidos políticos, asociaciones empresariales y colegios profesionales implicados en el proceso de participación para decidir el modelo de recogida de residuos para el casco histórico de Ciutat.
EMAYA ha explicado una propuesta basada en los elementos con los hay acuerdo: eliminación de los contenedores fijos en el casco histórico; incremento de la recogida selectiva; separar la recogida de residuos de comercios, restaurantes y hoteles de la recogida domiciliaria; realizar campañas de educación y concienciación; incrementar el control, la vigilancia y las sanciones; y estudiar sistemas de identificación de los usuarios y de bonificación para las personas y empresas que participen en la separación de los residuos.
A partir de aquí se descartaron dos de los sistemas propuestos: los contenedores soterrados y los contenedores de superficie, por no adaptarse a estos requisitos y también, en el caso de los primeros, por su elevado coste económico y su dificultad de implantación en la mayor parte de zonas del casco histórico.
Los sistemas que tuvieron mayor aceptación fueron la recogida selectiva móvil y el sistema "puerta a puerta".
En la última reunión celebrada el pasado diciembre, EMAYA se comprometió a estudiar con más detalles la aplicación concreta en el centro de Palma de estos dos sistemas.
